LO
S PERO SIGO
Texto:
1
Reyes 22:1-28
1
Tres
aos pasaron sin guerra entre los sirios e Israel. 2
Y
aconteci al tercer ao, que Josafat
rey de Jud descendi al rey de Israel.
3
Y
el rey de Israel dijo a sus siervos: No sabis que Ramot de Galaad
es nuestra, y nosotros no hemos hecho nada para tomarla de mano del
rey de Siria? 4
Y
dijo a Josafat: Quieres
venir conmigo a pelear contra Ramot de Galaad?
Y Josafat respondi al rey de Israel: Yo
soy como t,
y mi pueblo como tu pueblo, y mis caballos como tus caballos. 5
Dijo
luego Josafat al rey de Israel: Yo
te ruego que consultes hoy la palabra de Jehov.
6
Entonces
el rey de Israel reuni a los profetas, como cuatrocientos hombres,
a los cuales dijo: Ir a la guerra contra Ramot de Galaad, o la
dejar? Y ellos dijeron: Sube, porque Jehov la entregar en mano
del rey.
7
Y
dijo Josafat: Hay an aqu algn profeta de Jehov, por el cual
consultemos?
8
El
rey de Israel respondi a Josafat: An hay un varn por el cual
podramos consultar a Jehov, Micaas hijo de Imla; mas yo le
aborrezco, porque nunca me profetiza bien, sino solamente mal. Y
Josafat dijo:
No hable el rey as.
9
Entonces
el rey de Israel llam a un oficial, y le dijo: Trae pronto a
Micaas hijo de Imla.
10
Y
el rey de Israel y Josafat rey de Jud estaban sentados cada uno en
su silla, vestidos
de sus ropas reales,
en la plaza junto a la entrada de la puerta de Samaria; y todos los
profetas profetizaban delante de ellos.
11
Y
Sedequas hijo de Quenaana se haba hecho unos cuernos
de hierro,
y dijo: As ha dicho Jehov: Con stos acornears a los sirios
hasta acabarlos.
12
Y
todos los profetas profetizaban de la misma manera, diciendo: Sube a
Ramot de Galaad, y sers prosperado; porque Jehov la entregar en
mano del rey.
13
Y
el mensajero que haba ido a llamar a Micaas, le habl diciendo:
He aqu que las palabras de los profetas a una voz anuncian al rey
cosas buenas; sea ahora tu palabra conforme a la palabra de alguno de
ellos, y anuncia
tambin buen xito.
14
Y
Micaas respondi: Vive Jehov, que lo
que Jehov me hablare, eso dir.
Conocer
lo que tenemos que hacer y continuar sin detenernos es sin duda un
defecto que los humanos podemos hacer porque tomamos decisiones
incorrectas esperando que las condiciones mejoren y puedan llegar a
corregirse. En este pasaje miramos el proceso que se sigue cuando
cometemos errores sin que nos percatemos desde donde se arranc el
problema.
Comienza
la historia con el acercamiento de Josafat rey de Jud hacia Acab
rey de Israel y en este camino podemos preguntarnos si fue lo ms
acertado, porque realmente cul habr sido la razn para acercarse
a Acab, se espera que el motivo sea para trabajar, para hacer cosas
productivas o mejor an para adorar al Seor.
Cuando
el Seor nos convoca es una forma de estar con otros, pero hay
acercamientos que son un verdadero descenso como dice de Josafat rey
de Jud, pues no fue solo fsico al bajar de Jerusaln a Samaria.
El demostrar acercamiento y afinidad puede ser interpretado por la
otra parte a quien nos acercamos como una oportunidad para moverlo o
manipular de acuerdo a sus intereses.
Acab
expresa el problema y trata de participarlo al rey Josafat, dijo:
hemos perdido a Galaad de los Sirios y necesitamos ayuda para
recuperarla, quieres venir conmigo? Esto puso un compromiso para
Josafat al estar frente a frente, pues si hubiera estado en Jerusaln
hubiera podido decir a la peticin de Acab, no puedo en este momento
por cualquier motivo.
La
afirmacin de Josafat fue grave al decir "yo soy como t,
tambin mi pueblo y mis caballos, pues esta equivalencia no solo
debe ser externa o aun de sangre, sino tambin de espritu, y es
aqu cuando cambia la situacin pues podemos parecernos a otros
pero el Espritu Santo que nos hace iguales a los que lo tenemos su
gobierno en nuestras vidas, pero es muy diferentes con quienes no lo
tienen al Seor aunque tengamos afinidad, y algn tipo de cercana.
UN
ERROR DEL QUE SE QUIERE APARTAR
Aunque
no lo dice se puede pensar que Josafat aunque haya dado un s a
Acab, trataba de poner una barrera en lo espiritual para que la otra
parte desista y ser librados del compromiso hecho por nuestra lengua.
Estando en su casa posiblemente no quera desairar al rey dicindole
no voy contigo, pero al consultar al Seor era asegurarse que no
hara una locura lo que se dispona a hacer.
Acab
reuni a cuatrocientos profetas lo cual probara que la decisin
de ir a la batalla contra los sirios sera firme superando esa
barrera, pues no podan estar equivocados todos ellos. La respuesta
de todos ellos fue sube porque el Seor te la entregar en tu mano.
Hasta aqu parece que no se salvara de acompaarlo a la batalla.
Josafat
tuvo que insistir en preguntar si exista algn profeta del Seor
para consultarle, esta es una afirmacin que estaba diciendo que no
estaba de acuerdo con la opinin de aquellos primeros profetas.
Micaas era el profeta del Seor a quien podran consultar aunque
siempre le profetizaba mal dijo Acab, lo cual hablaba del desacuerdo
con su palabra. Josafat le dice que no hablara as, lo que le
trataba de decir era que no tuviera predisposicin de escuchar la
palabra, sabiendo que cuando rechazamos la palabra quedamos
expuestos.
As
sucede cuando nosotros pensamos que los siervos de Dios tienen algo
contra nosotros, cuando realmente los verdaderos, solo transmiten lo
que el Seor pone en sus corazones, y cuando se ministra no hay en
mente daar a nadie o maltratar a nadie sino poner la palabra del
Seor en los corazones.
QUIEN
PAGA POR EL SHOW?
El
rey Acab pagaba el show que otros montaban de acuerdo a su necesidad
porque era el rey, y as tambin nosotros podemos venir a ser
reyesitos que tenemos control sobre otros y tener un efecto similar
donde la otra parte conoce su papel y el beneficio que quiere.
Existen cosas que sabemos como son en realidad y que no estn
correctas o que no son buenas, pero seguimos adelante, como si fuera
todo real y como si nada se estuviera fingiendo. Hoy da mucha gente
paga bien para que le mientan, y mientras tengan recursos y poder
siguen, parecen satisfacer la necesidad interna de una voz que les
diga que sigan adelante aunque sea algo irreal. Personas que quieren
seguir sus vidas como estn sabiendo que todo es una mentira, as
se posponen decisiones que nunca se harn, aun sufriendo con tal de
no perder otras cosas que al final sern irrelevantes.
Los
reyes estaban sentados en sus sillas vestidos de ropas reales, lo
cual era comprometedor para aquellos profetas que estaban dispuestos
a satisfacer las palabras que queran escuchar. El que se siente
como un empleado o esclavo se sentir obligado a no hacer nada que
vaya a provocar incomodidad para el rey o poderoso.
Sedequas
era quien mejor representaba a este grupo de serviles profetas, pues
un pequeo detalle fue que se haba hecho cuernos de hierro para
decir que acorneara a los sirios hasta terminarlos. Pero si se
haba hecho los cuernos anticipadamente significa que ya tena el
mensaje de "Dios" sin consultar en el momento, sino que era
una profeca pre-fabricada. Sedequas saba esto pero segua, es
decir estaba claro que no entregaba palabra del Seor pero quedara
bien con el rey, la mentira se haba apoderado de la razn y de la
lgica ms elemental.
SEGUIR
A LA VERDAD O AL ESPIRITU DE MENTIRA
El
profeta Micaas antes de presentarse ante los reyes fue reconvenido
por el mensajero que lo llam dicindole que profetizara conforme a
los otros profetas para que no fuera disonante (sino que anunciara
buen xito), pues el rey no quera or algo diferente pues su
intencin era ir a pelear, ya que estaba obstinado en hacerlo. As
es aquel que se empea en algo y no puede soportar que alguien le
diga lo contrario a sus deseos.
El
profeta Micaa se compromete a decir solo lo que el Seor le dijera
y bajo esa premisa la palabra del Seor fue para probarlos, al
decirles que subieran a pelear y seran prosperados. Esto es sin
duda lo que todos queremos que nos digan (que vamos a salir bien), y
a la vez lo que a muchos nos gustara hablarles a los dems para
que nos aprecien, de esta manera mucha gente que se cree exitosa
estar siguiendo este tipo de mensaje.
Pero
el rey le exige que le diga la verdad, esto porque saba que no era
la palabra del Seor; siempre existe algo que nos alerta que no es
correcto lo que nos dicen, en el fondo Acab saba la voluntad de
Dios pero no la quera obedecer. Entonces Micaa dice la palabra
del Seor la cual no llevaba prosperidad sino que al contrario mir
esparcido a Israel como ovejas que no tienen pastor. Si lo invertimos
se podra decir que el prspero es aquel que tiene Pastor, pues
nada nos faltar con el Seor.
El
profeta les revela cmo un espritu de mentira sali para
engaarlos para que fuera Acab a pelear contra Siria, y Sedequas
golpea en la mejilla al profeta Micaa por no reconocer que ya no
haba Espritu del Seor en l. Micaas fue metido en la crcel
por el rey diciendo que lo mantuvieran hasta su regreso de la batalla
segn el rey volvera en paz, por lo que la respuesta del profeta
fue: si llegas a regresar en paz es porque no el Seor no ha hablado
por m, dicho de otra manera se entendera: si no vuelves ser
porque el Seor s habl por m.
Al
hombre natural y al cristiano carnal le gusta escuchar las mentiras
buenas para motivarse y seguir por ese camino equivocado, aunque su
conciencia les diga que no es lo correcto, sin embargo aunque alguien
se atreva a decir la verdad, parece que cuando se est obstinado
simplemente se sigue.
Que el Seor nos ayude a que no haya mentira en quienes nos hablan,
nos presiden, y nos aconsejan, y que cuando alcancemos a ver el
error, la equivocacin como se la mostraron a Acab y aun las
consecuencias de continuar en esa decisin, podamos detenernos y
corregir, y de esta manera no lamentar las malas decisiones fuera de
la voluntad de Dios.