Texto:
Filipenses
2:1-8
1
Por
tanto, si hay alguna consolacin en Cristo, si algn consuelo de
amor, si alguna comunin del Espritu, si algn afecto entraable,
si alguna misericordia,
2
completad
mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unnimes,
sintiendo una misma cosa.
3
Nada
hagis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad,
estimando cada uno a los dems como superiores a l mismo;
4
no
mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual tambin por lo
de los otros.
5
Haya,
pues, en vosotros este sentir que hubo tambin en Cristo Jess,
6
el
cual, siendo en forma de Dios, no estim el ser igual a Dios como
cosa a que aferrarse,
7
sino
que se despoj a s mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante
a los hombres;
8
y
estando en la condicin de hombre, se humill a s mismo,
hacindose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
La
identidad en Cristo se adquiere
por la fe y mientras vivimos tenemos que hacer el esfuerzo para
adquirir esa identidad, pues llegar un momento que se alcanzar
toda la estatura y la plenitud de Cristo, el apstol Pablo a
una altura de la vida con mucha recorrido en el ministerio y
con mayor identidad con Cristo pensaba
que su
muerte era
ganancia Fil
1:21.
La
preocupacin hoy en da es que como cristianos la identidad
denominacional es tan fuerte, socializante y confusa al evangelio que
no permita a muchos adquirir la identidad de Cristo, que solo se
alcanza a travs del evangelio. Cuando estaba preso el apstol se
preocupaba porque algunos encontraron la oportunidad de predicar el
evangelio con buenas intenciones, pero otros lo hacan por
vanagloria, para incorporar sus propias doctrinas de hombres y para
darse el lugar que no les corresponda.
El
apstol peda a los filipenses que vivieran de acuerdo al evangelio
Fil
1:27
y esto tiene que ver con la identidad y el
impacto en nuestra vida, manifestada en tener
un
mismo propsito, y
hacer una
lucha espiritual unnime,
esto
por
la fe que nos ha sido revelada en
su gracia. La lucha actual para hacer prevalecer la fe en nuestra
sociedad
requiere
de
pasar de una actitud pasiva a una activa
donde
se defiende la fe, esto viene de un impacto de la identidad del Seor
en
nuestra vida.
QU
SENTIMOS EN CRISTO?
La
unin en Cristo, qu provoca en nosotros? Si nos unimos en
matrimonio esa unin provoca un sentir que va hacindose ms
fuerte y aunque es cambiante, con el tiempo entendemos mejor algunas
cosas que antes no podamos.
El
estmulo por vivir en el Seor es importante cuando lo ponemos en
perspectiva el servicio a Dios, pues como cristianos la vivencia es
diferente, y as como pasa a algunos que no obedecieron a Dios en la
decisin del matrimonio su sentir no es tan bueno, influenciada
obviamente por su vivencia y su opinin puede ser dura y
contradictoria al matrimonio. Lo que se siente en un momento dado
podra no alcanzar a mover el deseo de servir a Dios genuinamente,
porque todava no doblega nuestra voluntad.
La
identidad en Cristo es importante porque as como un matrimonio
puede tener dificultades de identificarse como pareja, en lo
espiritual el cristiano puede pasar mucho tiempo sin tener las
caractersticas que lo hacen definirse como tal. Esto mismo tiene
alguna aplicacin como ministerio, pues si los que servimos no
tenemos el mismo sentir espiritual no estamos dejando que Dios nos
mueva bendicindonos a todos como congregacin. Por esto existieron
muchos profetas en ciertos periodos que actuaron casi solos porque el
Seor los tuvo que levantar haciendo a un lado a los dems aun a
algunos que tenan un liderazgo formal. Esto suceda porque eran
quienes tenan el mismo sentir de Dios.
HGANME
COMPLETAMENTE FELIZ
El
apstol Pablo tena una gran carga por los hermanos de Filipos, y
cunto ms para quienes son siervos del Seor, pues se espera que
seamos quienes estemos identificados con el Seor en mayor grado.
Los filipenses fueron muy afines con el ministerio de Pablo quien
fuera apoyado materialmente, pero haba una exigencia que iba ms
all de la buena atencin como servidores. Pueden haber hermanos
muy especiales, y el apstol agradeca su apoyo pero esta afinidad
y afecto no le limit para decirles lo que quera que alcanzaran en
lo espiritual, pues aquellas virtudes no eran suficientes para el
servicio eficaz para el evangelio.
Si
de verdad me aman, si me quieren consolar, si compartimos un mismo
espritu, si realmente me tienen afecto y si me tienen compasin,
entonces les pido que tengan una misma identidad con Cristo. Esta es
una carta con mucha carga humana como ministro, pues el apstol
aunque agradece su apoyo, sin embargo no se guarda el pedirles
cambios espirituales.
Esta
identidad tiene tres reas donde se manifestar y que como
servidores estamos obligados a buscar, y aquellos que no tienen esa
disposicin no deberan optar por servir a Dios para no ser estorbo
al evangelio de Cristo. Tener el mismo sentir es tener una misma
identidad, y esto se muestra en tres niveles en lo siguiente:
Lo
que siento dentro.
La misma forma de pensar, mi sentir interno, mi opinin, el inters,
que deben de ser los del Seor, como servidores no buscamos
lo propio, lo
personal, sino
que estamos
para dar a conocer el evangelio y esto significa vivir
para
los dems y
servirles con la identidad del Seor Jess.
Hacia
afuera
e
lo
que hago.
La identidad nuestra es el amor gape,
este
debe ser el sello en todo lo que hacemos, an
ms
en el servicio hacia los dems por cuanto tenemos que ser pequeos,
pues si no lo somos y servimos no ser agradable a Dios forzar la
humildad.
La
proyeccin que tengo.
La unanimidad habla de la unin de aliento o de espritu que nos
sugiere
el tener
un mismo esfuerzo en el servicio para el evangelio del Seor. No
debemos servir si no se hace fuerza para el mismo lado, y el apstol
est dicindoles que es necesario que jalemos juntos, porque si la
cabeza quiere una cosa y su mano quiere otra, entonces no tendremos
xito as se tengan todos los recursos disponibles.
Las metas que perseguimos deben ser las del Seor, aunque tengamos
una proyeccin bastante personalizadas
la
esencia no
se perder y
por ende la
identidad en Cristo.
RECOMENDACIONES
Y EJEMPLO
Algunas
claves que nos da el apstol es que no hagamos nada que pueda
dividir a la iglesia, sea de obra o de palabra porque har
destruccin y se perder la identidad del pueblo. Ni tampoco
hagamos las cosas para sobresalir creyendo que nos da honor
(vanagloria).
El
ejemplo es Cristo Jess pues su sentir fue de humillacin al
despojarse de su gloria no aprovechando que era Dios. Si yo me
aprovecho por tener el ttulo de pastor, dicono, lder, anciano,
estamos dando mal ejemplo que no permitir tener el mismo sentir o
identidad. La humillacin le llev a hacerse siervo de todos
viviendo sin ningn privilegio, comparado a lo hoy nosotros tenemos
son mayores privilegios que los que l tuvo.
Solo
esa identidad nos har caminar con la obediencia que hubo en el
Seor, pues no se consider superior a nadie, por esto permiti
sufrir como un hombre pecador siendo puro y sin mancha y hacerlo sin
reclamar nada, sin renegar, sin queja, hasta cumplir lo que le
enviaron a hacer, dando a conocer el evangelio con todo el poder de
Dios.
Pero
qu hacemos con todo aquel que ya est en el servicio a Dios y no
avanza en su identidad con Cristo, la iglesia puede estar engrosando
este grupo de estancados. Se merece una respuesta directa de aquellos
que estn sin identificacin con el Seor. Comenzar de nuevo
parece que no es una opcin propia del servidor pero puede ser ms
fcil la restauracin y adquisicin de la identidad de Dios.